Vencer el pecado

Vencer el pecado

COGwriter

Los cristianos necesitan vencer al mundo y sus caminos llenos de pecado.

Los cristianos se dan cuenta de que Jesús murió por nuestros pecados. La Biblia hace esto claro:

3 Pues yo les entregué a ustedes primero que todo eso lo que yo también recibí: Que Cristo murió por nuestros pecados de acuerdo a las Escrituras (1 Corintios 15: 3, NKJV siempre a menos que se indique otra cosa).

3 Gracia a ustedes y paz de Dios el Padre y nuestro Señor Jesucristo, 4 quien se entregó a Sí mismo por nuestros pecados, para que Él pudiera librarnos de esta presente era mala, de acuerdo a la voluntad de nuestro Dios y Padre, 5 a quien sea la gloria por siempre y para siempre. Amén. (Gálatas 1: 3-5)

A través de las observancias bíblicas tales como la Pascua y los Días de Panes sin Levadura (son actualmente los Días de los Panes sin Levadura en 2016), los cristianos aprenden mejor el precio del pecado a través del sacrificio de Jesús, la prevalencia del pecado en el mundo, y la necesidad de sacar al pecado de nuestras vidas.

Justo como los hijos de Israel tuvieron que dejar la esclavitud del Egipto físico (Deuteronomio 5: 6), los cristianos necesitan dejar al Egipto espiritual (Apocalipsis 11: 8) de este presente mundo malo (Gálatas 1: 4). Los cristianos necesitan salir del pecado, pero ellos necesitan la ayuda de Dios para vencer al pecado.

Versículos para memorizar que ayudan con vencer el pecado

Antes de ir al pecado y el arrepentimiento, hay algunas porciones de la Escritura que quizás deberían ser mostradas primero. Hay también versículos que usted realmente debería memorizar.

Aquí está el primero:

5 Confía en el Señor con todo tu corazón,
y no te inclines sobre tu propio entendimiento;
6 En todos tus caminos reconócelo a Él,
y Él dirigirá tus senderos. (Proverbios 3: 5-6)

Casi todos los días yo oro una ligeramente modificada versión de lo de arriba o al menos como sigue:

Padre en el cielo, confiemos en Ti con todos nuestros corazones y no nos inclinemos sobre nuestro propio entendimiento. En todos nuestros caminos ayúdanos a reconocerte a Ti y Tu dirigirás nuestros senderos.

Si usted peca, en el momento en que usted hace eso usted no está obviamente confiando en Dios con todo su corazón.

De manera interesante,note el versículo que viene inmediatamente después de Proverbios3: 6:

7 No seas sabio a tus propios ojos; teme al Señor y apártate del mal. (Proverbios 3: 7)

Así, nosotros vemos que no confiar en Dios, sino confiar en nosotros mismos (vanidad) puede llevar al mal. Pero que temer y confiar en Dios es el camino para apartarse del mal.

Los cristianos también deberían considerar las siguientes palabras de Jesús:

31 “Por lo tanto no se preocupen, diciendo, ‘¿Qué comeremos?’ o ‘¿Qué beberemos?’ o ‘¿Qué usaremos?’ 32 Pues detrás de todas estas cosas buscan los gentiles. Pues vuestro Padre celestial sabe que ustedes necesitan todas estas cosas. 33 Pero busquen primero el reino de Dios y Su justicia, y todas estas cosas les serán añadidas. (Mateo 6: 31-33)

Yo sugeriría que todos memoricen al menos la primera mitad de Mateo 6: 33.

Si usted está verdaderamente buscando el reino de Dios, esto le ayudará a usted a vencer el pecado – a diferencia de los hijos de Israel quienes no buscaron la justicia de Dios (cf. Romanos 10: 1-3).

Hay otro versículo que todos deberían memorizar, y está en negritas abajo:

1 Además, hermanos, yo no deseo que ustedes no estén conscientes de que todos nuestros padres estuvieron bajo la nube, todos pasaron a través del mar, 2 todos fueron bautizados en Moisés en la nube y en el mar, 3 todos comieron el mismo alimento espiritual, 4 y todos bebieron la misma bebida espiritual. Pues ellos bebieron de esa Roca espiritual que los seguía, y esa Roca era Cristo. 5 Pero con la mayoría de ellos Dios no estaba bien complacido, pues sus cuerpos fueron dispersados en el desierto.

6 Ahora estas cosas vinieron a ser nuestros ejemplos, con la intención de que nosotros no deberíamos codiciar cosas malas tal como ellos codiciaron. 7 Y no convertirnos en idólatras como lo fueron algunos de ellos. Como está escrito, “El pueblo se sentó a comer y a beber, y se levantó a jugar”. 8 Ni cometamos inmoralidad sexual, como algunos de ellos hicieron, y en un día cayeron veintitrés mil; 9 ni tentemos a Cristo, como algunos de ellos también tentaron, y fueron destruidos por serpientes; 10 ni nos quejemos, como algunos de ellos también se quejaron, y fueron destruidos por el destructor. 11 Ahora todas estas cosas sucedieron a ellos como ejemplos, y ellas fueron escritas para nuestra admonición, sobre quienes los fines de las edades han venido.

12 por lo tanto aquel que piensa que él está firme cuídese, no sea que él caiga. 13 Ninguna tentación se ha adelantado a ustedes excepto tal como es común al hombre; pero Dios es fiel, quien no permitirá que ustedes sean tentados más allá de lo que ustedes son capaces, sino con la tentación también hace la forma de escapar, para que ustedes puedan ser capaces de soportarla. (1 Corintios 10: 1-13)

Los hijos de Israel vieron los milagros, pero si bien ellos caminaron con Dios físicamente, ellos no se arrepintieron verdaderamente. Nosotros, como cristianos, debemos hacerlo del todo sin embargo.

Poner fuera el pecado requiere la ayuda de Jesús

Durante los Días de los Panes sin Levadura http://www.cogwriter.com/unleaven.htm nosotros no hemos de tener pecado en nuestras vidas, simbólicamente, por tener levadura en nuestras moradas (ver también Los cristianos y los días de panes sin levadura http://www.youtube.com/watch?v=y9w5jsnlsak). Este recordatorio anual ayuda a los cristianos a enfocarse mejor sobre la necesidad de tratar de vivir sin pecado.

Tal como usted no ha de tener un poco de levadura entonces, usted no ha de tener un poco de pecado puesto que ello lo afecta a usted (cf. Gálatas 5: 9; 1 Corintios 5: 7; Santiago 2: 8-13).

Los cristianos, sin embargo, todavía pecan, pero confesando los pecados, Jesús los perdonará:

8 Si nosotros decimos que nosotros no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos, y la verdad no está en nosotros. 9 Si nosotros confesamos nuestros pecados, Él es fiel y justo para perdonarnos nuestros pecados y para limpiarnos de toda injusticia. 10 Si nosotros decimos que nosotros no hemos pecado, nosotros le hacemos a Él mentiroso, y Su palabra no está en nosotros. (1 Juan 1: 8-10).

Pero eso no significa que nosotros vamos deliberada e intencionalmente a pecar y permanecer en ello:

26 Pues si nosotros pecamos voluntariamente después de haber recibido el conocimiento de la verdad, ya no queda ningún sacrificio por los pecados, 27 sino una cierta temible expectativa de juicio, y de fiera indignación que devorará a los adversarios. (Hebreos 10: 26-27)

A veces el pecado está tan adentro de uno que parece desafiar la voluntad humana. Note algo que el apóstol Pablo http://www.cogwriter.com/paul.htm escribió:

15 Porque lo que hago, no lo entiendo, pues no practico lo que quiero; al contrario, lo que aborrezco, eso hago. 16 Y ya que hago lo que no quiero, concuerdo con que la ley es buena. 17 De manera que ya no soy yo el que lo hace, sino el pecado que mora en mí. 18 Yo sé que en mí, a saber, en mi carne, no mora el bien. Porque el querer el bien está en mí, pero no el hacerlo. 19 Porque no hago el bien que quiero; sino al contrario, el mal que no quiero, eso practico. 20 Y si hago lo que yo no quiero, ya no lo llevo a cabo yo, sino el pecado que mora en mí. 21 Por lo tanto, hallo esta ley: Aunque quiero hacer el bien, el mal está presente en mí. 22 Porque según el hombre interior, me deleito en la ley de Dios; 23 pero veo en mis miembros una ley diferente que combate contra la ley de mi mente y me encadena con la ley del pecado que está en mis miembros. 24 ¡Miserable hombre de mí! ¿Quién me librará de este cuerpo de muerte? 25 ¡Doy gracias a Dios por medio de Jesucristo nuestro Señor! Así que yo mismo con la mente sirvo a la ley de Dios; pero con la carne, a la ley del pecado. (Romanos 7: 15-25)

Jesús también dijo, “con los hombres es imposible, pero con Dios todas las cosas son posibles” (Mateo 19: 26).

Nosotros todos hemos perdido la batalla con el pecado a veces, pero a través de Cristo nosotros podemos vencer.

Jesús fue tentado como nosotros lo somos y entiende:

14 Por tanto, teniendo un gran sumo sacerdote que ha traspasado los cielos, Jesús el Hijo de Dios, retengamos nuestra confesión. 15 Porque no tenemos un sumo sacerdote que no puede compadecerse de nuestras debilidades, pues él fue tentado en todo igual que nosotros, pero sin pecado. 16 Acerquémonos, pues, con confianza al trono de la gracia para que alcancemos misericordia y hallemos gracia para el oportuno socorro. (Hebreos 4: 14-16)

No importa cuán sucio se sienta usted, usted todavía puede abiertamente ir al trono de gracia para obtener misericordia.

No se ponga a sí mismo en un lugar en que usted es tentado a pecar

También hay consideraciones prácticas, físicas, que pueden ayudarle a usted a vencer el pecado.

Cuando usted ora, “no nos pongas en tentación, mas líbranos del mal” (Mateo 6: 13, KJV), la implicación es que usted no se ponga intencionalmente a sí mismo en áreas para ser tentado.

Por ejemplo, si uno está inclinado a jugar abiertamente, uno debería evitar ir a casinos o visitar ciudades tales como Las Vegas.

Uno que esté inclinado a fumar no debería estar con otros que fuman. Ni debería siquiera comprar cigarrillos. Sin embargo, puesto que fumar es un hábito muy difícil de romper, a veces uno puede encontrar comportamientos de reemplazo o algún otro punto físico de ayuda para romper el hábito. Pero si alguno desea dejar de fumar, él realmente necesita dejar de comprar cigarrillos. Ellos deberían también arrepentirse y pedir perdón por sus pecados cada vez que fumen (o que cometan algún otro pecado).

En cuanto hace a la dieta, Dios dice a Su pueblo “comer lo que es bueno” (Isaías 55: 2), de esta manera los cristianos deberían ser cuidadosos acerca de su dieta y no comer lo que no es bueno para ellos.

Jesús vivió sin pecado (Hebreos 4: 5) y la Biblia enseña que nosotros no hemos de permitir el pecado en nuestras vidas de ninguna manera, sino que nosotros hemos de ponernos en Cristo:

13 Caminemos apropiadamente, como en el día, no en jolgorios y borracheras, ni en lascivia y deseo, ni en conflicto y envidia. 14 Sino que pónganse en el Señor Jesucristo, y no hagan provisión para la carne, para cumplir sus deseos. (Romanos 13: 13-14)

Cuando se trata de alcohol, uno no debería estar con aquellos que beben abiertamente. Note lo que el apóstol Pedro http://www.cogwriter.com/peter.htmescribió:

1 Puesto que Cristo ha padecido en la carne, armaos también vosotros con la misma actitud. Porque el que ha padecido en la carne ha roto con el pecado, 2 para vivir el tiempo que le queda en la carne, no en las pasiones de los hombres, sino en la voluntad de Dios. 3 Porque ya es suficiente el haber hecho en el tiempo pasado los deseos de los gentiles, habiendo andado en sensualidad, en bajas pasiones, en borracheras, en orgías, en banqueteos y en abominables idolatrías. 4 A ellos les parece cosa extraña que vosotros ya no corráis con ellos en el mismo desenfreno de disolución, y por eso os ultrajan. (1 Pedro 4: 1-4)

Pedro incluso advierte que algunos considerarán extraño si usted deja tales comportamientos inapropiados, pero que es lo que los cristianos van a hacer. Adicionalmente:

33 No se engañen: “Las malas compañías corrompen los buenos hábitos.” (1 Corintios 15: 33).

Los cristianos no han de correr con la muchedumbre e ir al lado del mundo. El pecado crece (Santiago 1: 15) y se esparce (Romanos 5: 12).

Cuando se trata de inmoralidad sexual, el apóstol Pablo escribió:

18 Huyan de la inmoralidad sexual. Todo pecado que un hombre hace está por fuera del cuerpo, pero el que comete inmoralidad sexual peca contra su propio cuerpo. (1 Corintios 6: 18)

Uno huye de la inmoralidad sexual no poniéndose a sí mismo en una situación que podría de alguna manera esperarse que lleve a ello, o inmediatamente dejar una situación si ello parece posible.

Y Jesús enseñó:

27 “Habéis oído que fue dicho: No cometerás adulterio. 28 Pero yo os digo que todo el que mira a una mujer para codiciarla ya adulteró con ella en su corazón. 29 Por tanto, si tu ojo derecho te es ocasión de caer, sácalo y échalo de ti. Porque es mejor para ti que se pierda uno de tus miembros, y no que todo tu cuerpo sea echado al infierno. (Mateo 5: 27-29)

Así, no es sólo hacer algo equivocado lo que es pecado, sino también desear hacer el pecado es pecado. Y si el Internet y la pornografía son un problema para alguno, entonces él debería evitar el Internet completamente -al menos por un tiempo. Él tampoco debería ir a películas inapropiadas, tener o comprar revistas inapropiadas, etc.

Pero usted tiene que hacer más que evitar la tentacin: Se supone que usted a de hacer el bien (Mateo 5: 44; Lucas 6: 35).

Ahora usted puede decir que usted no tiene un problema con el juego, el alcohol, las drogas, la fornicación, o la pornografía, y si usted no lo tiene, entonces eso es bueno. Pero probablemente todos nosotros hemos sigo culpables del tipo de homicidio contra el cual advirtió Jesús:

21 “Habéis oído que fue dicho a los antiguos: No cometerás homicidio; y cualquiera que comete homicidio será culpable en el juicio. 22 Pero yo os digo que todo el que se enoja con su hermano será culpable en el juicio. Cualquiera que le llama a su hermano ‘necio’ será culpable ante el Sanedrín; y cualquiera que le llama ‘fatuo’ será expuesto al infierno de fuego. (Mateo 5: 21-22)

Y adicionalmente, note lo que Jesús llamó el más grande mandamiento:

29 Jesús le respondió: —El primero es: Escucha, Israel: El Señor nuestro Dios, el Señor uno es. 30 Y amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma, con toda tu mente y con todas tus fuerzas. 31 El segundo es éste: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. No hay otro mandamiento mayor que estos dos. (Marcos 12: 29-31)

Yo postularía que este primer mandamiento es el mandamiento que es más violado, por probablemente todos en el planeta, cristianos y no cristianos por igual. En cualquier momento que usted peca, usted muestra a Dios que usted ama a algo más que a Él. El segundo también es violado mucho.

Básicamente, los humanos tenemos un tiempo muy difícil haciéndonos lo suficientemente serios acerca de Dios y Sus caminos para ponerlos a ellos por encima DE TODO, TODO EL TIEMPO, en nuestras vidas.

Como cristianos, no es suficiente sólo no pecar, nosotros hemos de hacer la obra de Dios. Adicionalmente, considere que cuando usted ora a Dios no está limitado a lo que Él puede darle a usted – en otras palabras no descuide orar por mayor oportunidad, no sólo de no pecar, sino de hacer y apoyar Su obra.

Jesús enseñó y advirtió:

25 Porque el que quiera salvar su vida la perderá, y el que pierda su vida por causa de mí la hallará. 26 Pues, ¿de qué le sirve al hombre si gana el mundo entero y pierde su alma? ¿O qué dará el hombre en rescate por su alma? 27 Porque el Hijo del Hombre ha de venir en la gloria de su Padre con sus ángeles, y entonces recompensará a cada uno conforme a sus hechos. (Mateo 16: 25-27)

Los cristianos necesitan hacer la verdadera obra de Dios no importa lo que cueste. Esto involucra crecimiento personal, confiar en y amar a Dios, amar a los demás, y apoyar la obra de Dios del tiempo del fin.

Pero hay recompensas por hacer eso:

3 Confía en Jehovah y haz el bien. Habita en la tierra y apaciéntate de la fidelidad. 4 Deléitate en Jehovah, y él te concederá los anhelos de tu corazón. 5 Encomienda a Jehovah tu camino; confía en él, y él hará. (Salmo 37: 3-5)

Nosotros los cristianos debemos verdaderamente confiar en Dios y encomendar nuestros caminos a Dios.

6 Ahora reconozco que Jehovah da la victoria a su ungido; le responderá desde su santo cielo con la fuerza liberadora de su diestra. 7 Estos confían en carros, y aquéllos en caballos; pero nosotros confiamos en el nombre de Jehovah nuestro Dios. (Salmo 20: 6-7)

Si los cristianos verdaderamente confían en Dios, y no en sí mismos, ellos serán salvados.

Eso es parte de por qué enseñó Jesús:

9 En esta forma, por lo tanto, oren: Padre nuestro en el cielo, santificado sea Tu nombre. 10 Venga tu reino. Sea hecha tu voluntad sobre la tierra como lo es en cielo. (Mateo 6: 9-10)

Note que es la voluntad de Dios la que ha de ser hecha y por lo que nosotros hemos de orar, como también porque venga Su reino.

Note lo que Dios realmente desea:

8 Él te ha mostrado, oh hombre, lo que es bueno;
Y lo que el Señor requiere de ti
Sino que hagas justamente,
Ames la misericordia,
Y camines humildemente con tu Dios? (Miqueas 6: 8)

El problema de Satanás es que él rehusó caminar humildemente. Él era el querubín ungido (Ezequiel 28: 14) -el lo tenía todo – pero su orgullo entró en el camino (cf. Ezequiel 28: 17). Los humanos a menudo dejan que su orgullo se ponga en el camino (Proverbios 29: 33) – el orgullo infla a las personas (cf. 1 Timoteo 3: 6).

No obstante, los cristianos han de tratar de pensar como Dios:

5 Haya en vosotros esta manera de pensar que hubo también en Cristo Jesús: 6 Existiendo en forma de Dios, él no consideró el ser igual a Dios como algo a qué aferrarse; 7 sino que se despojó a sí mismo, tomando forma de siervo, haciéndose semejante a los hombres; y hallándose en condición de hombre, (Filipenses 2: 5-7)

 

Jesús tenía más de lo que nosotros los humanos podemos imaginar, no obstante Él fue lo suficientemente humilde para dejarlo y servir y morir por nosotros. Esa es la actitud que hay que tener para vencer verdaderamente.