Nicodemus: Un fariseo que conocía a Jesús

Nicodemus: Un fariseo que conocía a Jesús

nicodemus

Nicodemus por Miguel Ángel

COGwriter

Agosto 3 es el día que los Católicos han declarado como el día para San Nicodemus puesto que supuestamente parte de su cuerpo o posesiones fueron encontradas ese día.

Nicodemus es mencionado algunas veces en el Evangelio de Juan. Aquí está la primera:

1 Y había un hombre de los fariseos que se llamaba Nicodemo, un gobernante de los judíos. 2 Este vino a Jesús de noche y le dijo: —Rabí, sabemos que has venido de Dios como maestro; porque nadie puede hacer estas señales que tú haces, a menos que Dios esté con él. 3 Respondió Jesús y le dijo: —De cierto, de cierto te digo que a menos que uno nazca de nuevo no puede ver el reino de Dios. 4 Nicodemo le dijo: —¿Cómo puede nacer un hombre si ya es viejo? ¿Puede acaso entrar por segunda vez en el vientre de su madre y nacer? 5 Respondió Jesús: —De cierto, de cierto te digo que a menos que uno nazca de agua y del Espíritu, no puede entrar en el reino de Dios. 6 Lo que ha nacido de la carne, carne es; y lo que ha nacido del Espíritu, espíritu es. 7 No te maravilles de que te dije: “Os es necesario nacer de nuevo.” 8 El viento sopla de donde quiere, y oyes su sonido; pero no sabes ni de dónde viene ni a dónde va. Así es todo aquel que ha nacido del Espíritu. 9 Respondió Nicodemo y le dijo: —¿Cómo puede suceder eso? 10 Respondió Jesús y le dijo: —Tú eres el maestro de Israel, ¿y no sabes esto? 11 De cierto, de cierto te digo que hablamos de lo que sabemos; y testificamos de lo que hemos visto. Pero no recibís nuestro testimonio. 12 Si os hablé de cosas terrenales y no creéis, ¿cómo creeréis si os hablo de las celestiales? 13 Nadie ha subido al cielo, sino el que descendió del cielo, el Hijo del Hombre. 14 Y como Moisés levantó la serpiente en el desierto, así es necesario que el Hijo del Hombre sea levantado, 15 para que todo aquel que cree en él tenga vida eterna. 16 Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree no se pierda, mas tenga vida eterna. 17 Porque Dios no envió a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por él. 18 El que cree en él no es condenado; pero el que no cree ya ha sido condenado, porque no ha creído en el nombre del unigénito Hijo de Dios. 19 Y ésta es la condenación: que la luz ha venido al mundo, y los hombres amaron más las tinieblas que la luz, porque sus obras eran malas. 20 Porque todo aquel que practica lo malo aborrece la luz, y no viene a la luz, para que sus obras no sean censuradas. 21 Pero el que hace la verdad viene a la luz para que sus obras sean manifiestas, que son hechas en Dios. (Juan 3: 1-21)

Hay muchas cosas enseñadas de lo anterior. La primera es que muchos de los líderes religiosos de los días de Jesús sabían que Jesús era especial y que la lógica les decía a ellos que Él tenía qué estar haciendo la obra de Dios (pero la mayoría lo rechazó a Él y a Su obra, como la mayoría todavía rechaza a los verdaderos líderes de Dios y a su obra hoy).

El siguiente punto principal es la enseñanza acerca de nacer de nuevo. Los detalles acerca de esto están en el artículo Nacido de nuevo: ¿Una cuestión de semántica?

El siguiente para mencionar es que el plan de Dios que involucra a Jesús y la humanidad es acerca del amor. Jesús estaba enseñando también que Él vino para morir por todos y no por unos pocos (ver también Oferta Universal de Salvación y Esperanza de Salvación: ¿Cómo la Continuación de la Iglesia de Dios difiere de la mayoría de los Protestantes?). Y luego Jesús termina diciendo que los humanos a menudo aman la oscuridad y al diablo y que ellos odian la luz, que es la verdad. Esta es una razón por la cual los verdaderos cristianos han estado largo tiempo sujetos a ser ridiculizados y perseguidos (ver también Persecuciones por la Iglesia y el Estado).

Volviendo a Nicodemus, él tiene mención adicional en la escritura:

47 Entonces los fariseos les respondieron: —¿Será posible que vosotros también hayáis sido engañados? 48 ¿Habrá creído en él alguno de los principales o de los fariseos? 49 Pero esta gente que no conoce la ley es maldita. 50 Nicodemo, el que fue a Jesús al principio y que era uno de ellos, les dijo: 51 —¿Juzga nuestra ley a un hombre si primero no se le oye y se entiende qué hace? 52 Le respondieron y dijeron: —¿Eres tú también de Galilea? Escudriña y ve que de Galilea no se levanta ningún profeta. (Juan 7: 47-52)

38 Después de esto, José de Arimatea, que era discípulo de Jesús, aunque en secreto por miedo a los judíos, pidió a Pilato que le permitiese quitar el cuerpo de Jesús. Pilato se lo permitió. Por tanto, él fue y llevó su cuerpo. 39 También Nicodemo, que al principio había venido a Jesús de noche, fue llevando un compuesto de mirra y áloes, como cien libras. 40 Tomaron, pues, el cuerpo de Jesús y lo envolvieron en lienzos con las especias, de acuerdo con la costumbre judía de sepultar. 41 En el lugar donde había sido crucificado había un huerto, y en el huerto había un sepulcro nuevo, en el cual todavía no se había puesto a nadie. 42 Allí, pues, por causa del día de la Preparación de los judíos y porque aquel sepulcro estaba cerca, pusieron a Jesús. (Juan 19: 38-42)

Así, Nicodemos incluso ayudó a dejar el cuerpo de Jesús en la tumba. Esto muestra que después de su encuentro con Jesús en Juan 3, Nicodemus permaneció como un creyente.

Algunos creen que Josefo (un historiador judío del siglo primero) mencionó a este mismo Nicodemus en lo siguiente:

1. Un poco después Pompeyo vino a Damasco, y marchó sobre Coelesiria; en cuyo tiempo vinieron embajadores a él desde toda Siria, y Egipto y de Judea también… 2. En un poco tiempo después de eso vinieron embajadores contra él, Antipater de Hyrcanus, y Nicodemus de Aristobulus; que a lo último también lo acusaron de haber recibido sobornos; primero Gabinius, y luego Scaurus, –el uno trescientos talentos, y el otro cuatrocientos; por el cual procedimiento él hizo a estos dos sus enemigos, además de los que él tenía antes. (Josefo. Antigüedades de los Judíos. Libro XIV, capítulo 3).

Si este era el Nicodemus de la escritura, ello implica que él tenía una cierta cantidad de influencia cuando estaba vivo.

La Enciclopedia Judía enseña esto acerca de él:

Nicodemus

Prominente miembro del Sanhedrín, y un hombre de riqueza; vivió en Jerusalén en el siglo primero E.A. Él es mencionado en Juan iii. 1-21, vii. 50, xix. 39. En el primero de estos pasjes él es representado como “un gobernador de los judíos” quien aprendió de Jesús lo que significaba “renacer por el bautismo”, como si ese término rabínico hubiera sido completamente desconocido para él (pero ver Bautismo y Nacimiento, nuevo). El segundo pasaje registra cómo él hizo su visita a Jesús por la noche, en orden a que él no pudiera ser conocido como uno de los discípulos de este último. En el tercer pasaje el y José de Arimatea son descritos como tomando a cargo el cuerpo de Jesús en orden a darle decente entierro. Que el hombre traído a semejante prominencia en el cuarto Evangelio debe haber sido una figura bien conocida de la sociedad judía en ese tiempo es evidente. Con toda probabilidad él es idéntico con el Talmúdico Nicodemus ben Gorion, un santo popular notado por sus poderes milagrosos; y esto explicaría también la referencia a “cosas celestiales” en las discusiones de Jesús con él (Juan iii. 12).

El apocalíptico Evangelio de Nicodemus, que da un relato de Jesús ante Pilatos y el Sanhedrín, como también de su muerte y resurrección, pertenece al siglo tercero, aunque la muestra más antigua del manuscrito data del doceavo. (Nicodemus. Jewish Encyclopedia of 1906. http://www.jewishencyclopedia.com/articles/11525-nicodemus_ viewed 08/03/13)

Note que el llamado Evangelio de Nicodemus se creía haberse originado mucho después de que Nicodemus habría muerto y por lo tanto no es un verdadero escrito de él. Tampoco hay evidencia confiable de que Nicodemus llevara a cabo ningún milagro pero es posible que Dios lo usara a él en esa capacidad.

La tradición sostiene que Nicodemus fue posteriorment martirizado, y eso es posible, si bien no cierto.

Nicodemus creyó a Jesús, estuvo de pie para seguirlo a Él, y ayudó a colocarlo a Él en la tumba. Su encuentro con Jesús en Juan 3 presentó la oportunidad para Jesús de hacer varias declaraciones doctrinales que Dios quiso que se registraran para nuestro tiempo.

¿Entiende usted verdaderamente lo que Jesús estaba enseñando a Nicodemus?

Posted in Vida cristiana
Acerca de la CCOG
La Continuación de la Iglesia de Dios, que intenta representar al remanente más fiel de la porción de Filadelfia (Apocalipsis 3: 7) de la Iglesia de Dios, basa sus creencias en la Sagrada Biblia. Lea la Declaración de Creencias de la CCOG para más información Declaración de las Doctrinas de la Continuación de la Iglesia de Dios.
Artículos recientes